Ciudad de México - El Inter Miami espera remontar el marcador ante el Vancouver. Foto: AFP / Agencias Noticias
Ciudad de México | 30 Abr 2025 - 09:18hrs
El Inter Miami perdió 2-0 en la ida de las semifinales de la Concachampions y, aunque el panorama de cara a una eventual remontada ante el Vancouver Whitecaps luce complicado, nada ni nadie altera la fe de Javier Mascherano. El director técnico de las Garzas apeló a la historia para mandar un mensaje claro de que en el futbol todo es posible y recordó aquel regreso triunfal del Barcelona sobre el PSG.
“Esa noche aprendí que nada es imposible. En el futbol todo puede pasar. Una eliminatoria que perdíamos 4-0. Nos meten un gol y teníamos que hacer tres más; lo hicimos. Hasta que el árbitro no indica el final, todo puede pasar”, dijo el argentino.
En aquel equipo que le logró dar la vuelta a un 4-0 estaban jugadores como Lionel Messi, Luis Suárez, Sergio Busquets y Jordi Alba, quienes actualmente militan en el Inter Miami. “Tengo en aquel momento cuatro compañeros que vivieron eso conmigo y mejor que nadie pueden transmitírselo a los compañeros.
Los contextos son diferentes, pero la eliminatoria nos va a dar posibilidades. Liverpool perdía 3-0 una final de Champions y remontó, hay muchos ejemplos. El desafío es enorme, yo encantado de poder vivirlo y encantado de poder estar”, agregó.
Javier Mascherano sabe que no será una tarea fácil para el Inter Miami
Aunque la tarea no será sencilla, el estratega argentino confía en el trabajo que ha realizado al frente del Inter Miami. En 16 partidos dirigidos, ha ganado 10, empatado tres y perdido tres, por lo que las expectativas son elevadas.
“Creo en lo que hacemos, creo en lo que venimos haciendo y entrenando. Va a hacer cuatro meses que estamos en el club y a mí una derrota o dos no me van a cambiar la perspectiva de las cosas. Creo en lo que hago en el día a día. Esto de pegar volantazos no va conmigo”, explicó Mascherano.
El Inter Miami confía en aprovechar el apoyo de su gente en el Chase Stadium y hacerle ver al rival que no todo el trabajo está hecho.
“Tenemos que salir fuertes y hacerles sentir que están jugando fuera, pero sin volvernos locos”, añadió.